Aunque era un secreto a voces para algunos, hace unos meses se produjo el descubrimiento para la opinión pública de que empresas como Cambridge Analytica extraen datos de plataformas digitales como Facebook para perfilarnos e introducir contenidos micro-segmentados que influyan en nuestra percepción de la realidad, ya sea para comprar un producto o para votar por una opción política. Aquí el capítulo de nuestro libro en el que hacíamos alusión a ello. Para lo que está sirviendo, al menos, es para introducir el debate en la esfera pública en torno a importancia de la privacidad y el cuidado de nuestros datos en el entorno digital. En el artículo que os dejamos a continuación, Privacy International -una organización sin ánimo de lucro dedicada a la defensa de la privacidad mediante la litigación, la investigación y la asesoría en torno a esta cuestión- apunta siete claves sobre las que la clase política tiene que plantearse una regulación que establezca unos límites en cuanto a la protección de datos.
En este enlace podéis leer sus propuestas. Avisamos de que está en inglés.